jueves, 22 de marzo de 2012

domingo, 16 de octubre de 2011

Beber, no olvidar.

A la de tres... ¡TRES!

El alcohol quemaba mi garganta, risas. La música inundaba todo y hacía que mi cuerpo bailara casi sin pensarlo. Mi cabeza daba vueltas, me sentía bien, me sentía muy bien. Rodeada de multitud, cómoda, en mi lugar. Quedaba toda la noche por delante y , aún así, me parecía poco.

Más tequila, más vodka... Más, más, más...

Y de fondo, tú. Siempre tú.


S.Girl.

martes, 16 de agosto de 2011

Frágil

Es...complicado. Algo tan frágil... Puede romperse en cualquier momento, si no tienes cuidado, puede desaparecer. Quizás ahora esté rompiendose, incluso puede que ya esté roto... No, no intentes arreglarlo, por dentro está vacio, y volverá a quebrarse... No entiendo. Si en realidad no me importa. Se siente mal, pero por fuera es fuerte. Tan fuerte...pero tan frágil...

Rockstar*

viernes, 8 de julio de 2011

¿Qué pasaría si el día se volviese oscuro?

Si todo se volviese oscuro de repente, buscaría estrellas para que el cielo se volviera a iluminar, si todas las ilusiones y planes se estropeasen, buscaria otras posibilidades y otras metas para ser felíz, olvidaría ese día soleado para recordar esa noche estrellada...

Todo el mundo está en busca de esa sonrisa que le alegra el día :)

Rockstar *

martes, 17 de mayo de 2011

Tormenta de felicidad.

Noté como su mano apretaba la mía, moví la cabeza y estaba mirándome con esa sonrisa picarona que solo ella sabe poner. Sus grandes ojos marrones centelleaban posados directamente en los míos. Le sonreí casi sin pensarlo mientras mi cabeza daba vueltas, podía ver a través de su mirada lo que estaba pensando. El flequillo se me pegaba a la frente y el pelo me caía empapado por la lluvia que hacía un momento solo eran gotas sueltas que caían tan separadas que ni se notaba que estaba lloviendo. Sus rizos también estaban mojados y caían deformados y pegados unos a otros. Dimos un salto al escuchar el primer trueno, fue tan sonoro que por un momento pensé que el cielo se estaba rompiendo, abriéndose en dos. Fue entonces cuando los planes que podía leer en su mente se hicieron realidad - Uno, dos y... ¡¡TRES!!-, tras su rápida cuenta atrás empezó a correr arrastrándome agarrada de la mano. La lluvia era tan fuerte que parecía que me atravesaba la piel y llegaba a los huesos, los relámpagos bailaban al compás de los truenos y una luna tímida se asomaba entre los nubarrones negros como el tizón. Nosotras corríamos, pero no con la intención de escapar del chaparrón, simplemente por diversión. Saltamos sobre los charcos, bailamos y cantamos por las calles mojadas. No podíamos parar de reír aunque teníamos tanto frío que la piel se nos ponía de gallina y no parábamos de tiritar. Al entrar en su casa fuimos dejando pistas de agua por el suelo hasta entrar en el baño. Una vez dentro, llenamos la bañera con agua caliente y nos metimos vestidas.
Hoy, lo recuerdo como el día más feliz de mi vida, aunque después me tiré dos semanas resfriada. Si pudiera elegir un día y repetirlo, sería ese día.

Stupid:)